He decidido utilizar la Teoría Fundamentada en primer lugar porque es una metodología cualitativa bastante robusta y metódica que permite generar teoría directamente a partir de los datos. Este enfoque es particularmente útil en contextos donde se desea desarrollar una nueva comprensión teórica a partir de las experiencias de los participantes, especialmente en el contexto de una entrevista. La Teoría Fundamentada nos ofrece un marco sistemático para desglosar, comparar y categorizar los datos, permitiendo la emergencia de teorías que están profundamente arraigadas en la realidad de los entrevistados. Dentro de las variantes de la Teoría Fundamentada, he optado por la Teoría Fundamentada Constructivista en lugar de las versiones glaseriana o straussiana. Esto se debe a varias razones cruciales relacionadas con la naturaleza específica del barrio del Pilar y los objetivos de este estudio. A diferencia del enfoque glaseriano, que minimiza el uso de teoría previa y promueve un análisis inductivo puro, la versión constructivista de Kathy Charmaz permite integrar de manera crítica el conocimiento existente, lo cual es esencial para entender lo que sucede y ha sucedido en el Barrio del Pilar. La Teoría Fundamentada Constructivista nos permite reflexionar sobre nuestro papel como investigadores y cómo nuestras propias experiencias y valores influyen en el análisis. Este enfoque co-constructivo no solo enriquece la interpretación de los datos, sino que también nos ayuda a navegar por las corrientes subyacentes de la cultura local, permitiendo una comprensión más auténtica y matizada de los factores que influyen en el consumo de alcohol y tabaco en el barrio del Pilar.
no sé, mi perro es miu bonit
